lunes, 7 de diciembre de 2009

Amanecí un lunes

Estoy cercado, rebotando como una pelotita de ping pon, me deslizo dentro de sus mentes, entre sus intervenciones irremediables y mi futuro incierto.

Es alto el precio de mi cabeza, y solo estoy buscado por mí. Los testigos se amontonaran a ver el próximo escalón
.
Garganta seca y profunda, de donde has brotado? Ellos siguen a gran velocidad con una alta dosis de adrenalina, aunque dentro de una cámara lenta, interminable e indescifrable.

Desnudo, e incomunicablemente vivo me persigo de mi, del yo, y del ello o aquello.

Amanecí un lunes, luego me nuble y me fue desencontrando en bruma sin llegar a ser rocío.

Mes si me esperan?, El deceso se crea como una magia gris que no llega a ser negra porque da lástima.

Los radares espías se vuelven a enamorar de la luz mala, y persiguen a su ganado por un campo plagado de espinas.

Volví a anochecer, y luego, nada... La luz? Han cortado la luz? Me han apagado el sol? Me han anestesiado de ceguera? Y la luz?

Muerte, muerto de risa. La última parada de ésta vida se ve a lo lejos, se ve cerca, se ve, ya no se ve, o no la veo. La luz? Y la luz?

No hay comentarios:

Publicar un comentario