domingo, 25 de julio de 2010

El día que llegó la pobreza

De repente se paró frente a mí, justo a lado de La Soledad. Y sin dejar caer al segundo en el reloj del tiempo, invitó a La Risa para que juntas, las tres, se burlaran de mi. Al oírlas, La Burla me envío un mensaje de texto con la photo de La Muerte.
De tanto en cuando me escondo en Estelares, y esa, la nuestra, fue la escena ideal para hacerlo. La Bonita se hizo isla, inalcansable, y un gato negro de rojo intenso con reflejos violáceos se paseo por delante. Destacados aromas maduros que recuerdan frutas negras frescas, como moras. Intensidad, blancura y juventud. Equilibrio, de cuerpo medio y final agradable. La Chiquita! No hay como La Chiquita!!!.
El cobre, y el papel más aún, desaparecieron. Soy pobre, y siento ganas de matar, pero primero me quiero matar a mi, y a mi yo, y a mi otros, el yo de mi. Siento impotencia y resentimiento, pero sobre todo dolor, lástima de mi mismo.
Sin los demás con que creí estar, despierto lo puedo ver, las proyecciones son siempre ficticias, al igual que las promesas, los compromisos, las obligaciones y los juramentos, los testimonios y los sacramentos.
Está todo verdaderamente mal, y el mal, en todo es verdadero, verdaderamenete malo.
Hay quienes dicen que mataron a las ideas; sin embargo, La Locura y El Suicidio me visitan asiduamente. Y los asesinos de siempre, Mis Recuerdos, me saborean al verme, dócil, frágil, y cobarde.
Me dispararé un Domingo, como éste, como todos los tantos que no pudieron hacerlo. Tengo la imagen, mis ojos son esclaves de ella.

viernes, 16 de julio de 2010

Blanca y mágico: otro julio gélido

Fresco, pero sin que el frío te toque vas patinando sobre la escarcha de la mañana. Te sacás la sábana de los ojos y su perfume de pétalos. El sol sobre la calle y el reflejo de otro día. Las aves se dejan acariciar y llevar a la rastra por un jamaiquino viento que no viene desde el mar.
Volviste entre sus piernas a estar, y a nadar por la orilla de sus labios. Y entre las pesadillas aparezco y me vuelvo carne de mis pesadillas. Y los sueños?
Es, se hace y vuelve a nacer, y se pierde para encontrarse y reconocerse perdida por el amor. Olvidadiza, mi suspiro no alcanza a agradecerte la magia, y tu saliva es miel, un tanto menos empalagosa, pero dulce. Y las hojas, y las nubes, todo trasciende más allá del cristal, entre los segundos de una eternidad con vos, entre extrañarte y retornar fresco, y volver a empezar...

lunes, 12 de julio de 2010

Las Temporadas de tu Amor

Te ves paseando por Las Temporadas de tu Amor. Te corro, te peleo, te volvés y me respondés. El fenómeno pareciera ser parte del proceso madurativo de una relación, pero molesta, entorpece, y hasta a veces duele y quema como un hielo que se pasea por la madrugada de nuestras sábanas.
Me veo vacacionando sobre tu cuerpo, en una villa desprovista de infraestructura. Nos quedamos en la arena, y alrededor no hay nada abierto, hasta que una pala femenina que corta leña se acerca y junto a un buen policía nos pasean por El Bosque Encantado.
La película se queda de a poco sin subtítulos, pasamos a ser protagonistas de un desencuentro, un malentendido que se repite y se enrosca como lo hago últimamente con gran facilidad.
Un trago massimo, una hamburguesa con espuma, tu boca, y la piel de postre. Tus ojos y ese futuro juntos, una mañana helada y el fuego nos ahoga. Volvemos a la paz, tenemos que hacerlo. La semana que pasó fue otra temporada, dejemos que ésta se pierda...